29 de febrero de 2016

Estrategias y tácticas: De Certeau, lo cotidiano, la metodología y el poder


Para este paquete de materiales formativos proponemos las categorías de Michel De Certeau de estrategias y tácticas, como una manera de 1) pensar lo cotidiano y sus "artes de hacer", 2) a las metodologías como parte de una racionalidad científica que es, en cuanto estrategia, un poder excluyente, y 3) a valorar las formas vivas de lo cotidiano para inspirar el uso de la metodología como táctica. 

El paquete tiene tres partes (por lo pronto). La primera es el texto de De Certeau, del cual aquí solo se cita un resumen, La invención de lo cotidiano. Vol. 1: Artes de Hacer (puede descargarse aquí) Es recomendable todo el libro, pero es suficiente con el capítulo III (páginas 35-52).  

La segunda parte son las fotografías de habitaciones(?) de indigentes que acompañen al texto. Cuál es nuestra idea de la indigencia, cuál es la idea de la sociedad, y cómo entender a partir de la categoría de táctica de De Certeau.

La tercera parte, hasta abajo, son dos películas que se proponen para conversar sobre las estrategias y las tácticas. 




Tácticas y estrategias TEXTO


“Llamo 'estrategia' al cálculo de relaciones de fuerzas que se vuelve posible a partir del momento en que un sujeto de voluntad y de poder es susceptible de aislarse de un "ambiente". La estrategia postula un lugar susceptible de circunscribirse como un lugar propio y luego servir de base a un manejo de sus relaciones con una exterioridad distinta. La racionalidad política, económica o científica se construye de acuerdo con este modelo estratégico.
Por el contrario, llamo 'táctica' a un cálculo que no puede contar con un lugar propio, ni por tanto con una frontera que distinga al otro como una totalidad visible. La táctica no tiene más lugar que el del otro. Se insinúa, fragmentariamente, sin tomarlo en su totalidad, sin poder mantenerlo a distancia. No dispone de una base donde capitalizar sus ventajas, preparar sus expansiones y asegurar una independencia en relación con las circunstancias. Lo "propio" es una victoria del lugar sobre el tiempo. Al contrario, debido a su no lugar, la táctica depende del tiempo, atenta a "coger al vuelo" las posibilidades de provecho. 

Lo que gana no lo conserva. Necesita constantemente jugar con los acontecimientos para hacer de ellos "ocasiones". Sin cesar, el débil debe sacar provecho de fuerzas que le resultan ajenas. Lo hace en momentos oportunos en que combina elementos heterogéneos (así, en el supermercado, el ama de casa confronta datos heterogéneos y móviles, como las provisiones en el refrigerador, los gustos, apetitos y humores de sus invitados, los productos más baratos y sus combinaciones posibles con lo que ya tiene en casa, etcétera), pero su síntesis intelectual tiene como forma no un discurso, sino la decisión misma, acto y manera de "aprovechar" la ocasión. 



Muchas de estas prácticas cotidianas (hablar, leer, circular, hacer las compras o cocinar, etcétera) son de tipo táctico. Y también, más generalmente, una gran parte de estas "maneras de hacer": éxitos del "débil" contra el más "fuerte" (los poderosos, la enfermedad, la violencia de las cosas o de un orden, etcétera), buenas pasadas, artes de poner en práctica jugarretas, astucias de"cazadores", movilidades maniobreras, simulaciones polimorfas, hallazgos jubilosos, poéticos y guerreros. Estas realizaciones operativas son signo de conocimientos muy antiguos.”  (De Certeau, 2000, pp. XLIX-L)


Tácticas y estrategias CINE



Para ayudar al debate y profundizar sobre las estrategias y las tácticas sugerimos dos películas, y tres temas que pueden servir en un inicio, pero no restringir el desarrollo de otros temas que surjan de la discusión grupal:


  1. la ciencia, la técnica y la tecnología como formas de relación.
  2. las metodologías de lo cotidiano o lo cotidiano de las metodologías.
  3. lo posible, lo imposible y el futuro.

La primera película es Ciudad mágica (Magic Town, 1947). Un film sorprendente del que me hablo Javier Encina. Aquí les dejo el recorte de una escena de la peli, lo hice con TubeChop.





Enlace a la película completa

La segunda película se llama La estrategia del caracol (1993), una obra extraordinaria de cine colombiano. También les dejo un recorte.





Enlace a la película completa


Estrategias y tácticas EXTRA


Al contarle a Javier sobre este paquete me recordó el poema de Mario Benedetti que lleva el mismo nombre, lo dejo por aquí porque incluso puede volverse la provocación inicial ;-)





Mi táctica es
           mirarte
aprender como sos
quererte como sos 

mi táctica es
           hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible 

mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme con vos 

mi táctica es
           ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
           ni abismos 

Mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
           simple 




Para curiosear:

Un texto de De Certeau sobre caminar en la ciudad.


16 de febrero de 2016

La ciencia de lo común, o lo común de la ciencia. Hacia otra formación en investigación




"Los ‘hechos’ científicos son enseñados en una edad muy temprana en la misma forma en que los ‘hechos’ religiosos lo eran sólo hace un siglo. No se hace ningún intento de despertar las capacidades críticas del estudiante de modo que pueda ver las cosas en perspectiva" (Paul Fayerabend)


En las clases de introducción a la metodología de investigación, de la carrera de promoción de la salud, hemos empezado a imaginar otra forma de enfrentar la formación de la investigación. La propuesta ha ido tomando forma durante las primeras clases de la siguiente manera: en las aproximaciones clásicas de la construcción de conocimiento, la metodología es el núcleo de la disciplina a través de la cual se supondría que los sujetos nos desprendemos de nuestras formas cotidianas de pensamiento y acción, para adoptar maneras especializadas, técnicas y procedimientos, que garantizarían que el conocimiento se construya de forma autónoma a la sociedad y la subjetividad de quienes investigan. Alejamiento y distanciamiento, como me hacía notar el otro día mi amiga María José, son términos muy usados en las ciencias sociales, lo mismo en enfoques cualitativos que en cuantitativos, alejamiento del investigador de su objeto de estudio.

Los cursos de metodología parten del supuesto de que l@s estudiantes no saben pensar científicamente, y proponen enseñar el camino correcto: el método. Se continúa así un currículum, iniciado desde la educación básica, que mistifica la ciencia y el conocimiento, y que en el nivel universitario se propone, como decía Foucault, constituir "un sistema de control en la producción de discurso, fijando sus límites por medio de la acción de una identidad que adopta la forma de una permanente reactivación de las reglas" (cit. en Wallerstein, 2007: 37). Esa identidad ordena que se repudien las formas de lo cotidiano, los lenguajes que usamos, las maneras de estar, de resolver problemas, de crear, los saberes de nuestros padres y abuelos, los ingenios del barrio, la intuición y la corporalidad. Es el discurso académico el que de principio crea las distinciones, las dicotomías y las fragmentaciones: entre la cultura escrita y la cultura oral, entre la razón y la emoción, entre lo científico y lo político. 

¿Cómo aprender las metodologías de las ciencias sociales sin reproducir la asimetría, desde la que sólo los conceptos y las prácticas disciplinadas tienen el derecho de conocer el mundo?, ¿Cómo aprender a construir conocimiento sin alejarnos de la gente, sin censurar los discursos y las formas de lo cotidiano?


Estos días me encontré con un texto de Jesús Martín-Barbero que cuenta un caso de algo que se repite incesantemente en las escuelas y universidades: 


"Un amigo psicólogo que hacía su tesis hace un año en ciudad Bolívar, la enorme subciudad repleta de desplazados por la guerra que vive Colombia, venidos del país entero y muchos de la Costa atlántica y Caribe, observó cómo en una escuela al mismo tiempo en que los maestros y maestras trataban de educar a los niños y las niñas costeños destruían las bases de su propia cultura. Pues resulta que el vocabulario de los costeños no tiene nada que ver con el vocabulario de los nativos de Bogotá y mucho menos con el de los libros que se leen en las escuelas de Bogotá. Con el agravante de que la riqueza de ese vocabulario está profundamente ligada a una enorme y anárquica creatividad gestual y narrativa. Confundiendo hablar distinto con hablar mal, los maestros se propusieron enseñar a los niños costeños a hablar bien. ¿Con qué resultado? ¡Un año y medio después mi amigo psicólogo se encontró con que los niños de esa escuela se habían vuelto mudos! Porque ahora sólo hablaban cuando estaban seguros de saber decir las cosas con las palabras que estaban en los libros." (2009: 27)


Se trata pues de no "confundir hablar distinto con hablar mal", de no quedarnos mudos, se trata de intentar formas de poner a la metodología en una "simetría cosmopolita", usando la expresión de Latour, con nuestra cultura, nuestro mundo, nuestras maneras de estar en el mundo. Partiendo de que la dicotomía cultura-escrita-académica-científica vs cultura-oral-cotidiana-popular: 1) empobrece la comprensión acerca de la construcción de conocimiento, y 2) censura nuestras maneras de comprender y estar en el mundo, intentaremos en este curso estudiar y vivenciar las metodologías como prácticas cotidianas en las que se entrelazan, contradicen y confunden la ciencia y la vida.



Las ideas de ciencia corrientes a las que estamos acostumbrados resaltan esta autonomía del conocimiento científico, que se anuncia independiente de la vida social. Por ello comenzamos a explorar qué entendemos por metodología a partir de la vida cotidiana, dejando que las ideas puedan expresarse antes de corregirlas. Los equipos del grupo vespertino elaboraron representaciones para una definición verbal en la que todos concordaban, aquella que dice que la metodología "es una serie de pasos para conseguir un objetivo de investigación". Gracias a la expresión escénica esa definición verbal,  escolar y homogénea, se vio empalidecida frente a una diversidad de escenarios y situaciones, desde la avería de una computadora, hasta el aprendizaje del baile, pasando por el horneado de un pastel, la visita al médico y el transporte colectivo, desde donde pudimos iniciar la reflexión sobre lo cotidiano y el conocimiento.

Otro aspecto, que ha ido apareciendo estas primeras clases, es la relación de la metodología con el campo de problemas, temas y prácticas de la promoción de la salud: la forma de enseñanza tradicional de la metodología y las cuestiones epistemológicas plantea discusiones generales desligadas de escenarios situados, como si los/las investigadoras indagaran en un espacio sin contexto. Hemos visto, al analizar noticias de la prensa, el valor formativo que puede tener el análisis crítico de la relación entre conocimientos científicos y/o técnicos con la sociedad en temas de salud. Problemas como políticas públicas de salud, derechos de salud o salud comunitaria, pueden ser abordados desde este enfoque y con ello plantear en la formación de las y los promotores la importancia de la comunicación entre saberes, y de las  herramientas de traducción entre diferentes especialistas y la gente.


Si queremos aprender el lenguaje de la metodología, como otro lenguaje con el que podemos interactuar, jugar y adaptar, entonces rechazamos una enseñanza de la metodología que/cuando:

-se impone como la única vía (única verdad, camino, herramienta...)
-se presenta descontextualizada/despolitizada 
-no se puede mezclar o re-mezclar
-nos separa de la gente

Una nota sobre el programa oficial de estudios de esta asignatura. La crítica que se hace aquí a la enseñanza de la metodología se observa también en el programa, cualquiera que lo lea (enlace) podrá notarlo por sí mismo. Sin embargo, nuestra propuesta retoma los propósitos del programa (como se señala más adelante en las líneas de acción).  



Comenzamos a hablar de las formas en que la gente conoce e investiga, y nos sorprendimos de la riqueza y diversidad de todo lo que sabemos sobre investigar "in the wild". Por ejemplo, para la pregunta "¿cómo investiga la gente?" el grupo matutino dio las siguientes respuestas: a través de la indagación, la observación... deducen a través de rumores... observando por ventanas... intuiciones, hacen preguntas, y relatan algún acontecimiento... con Internet, experiencia, revistas, libros y medios de comunicación... chismeando y en reuniones... consultando a la abuelita. En cambio sabemos muy poco de los expertos, ellos sólo investigan: mediante datos, estadísticas, documentales, libros y teorías. Eso si, parece que no se mezclan, que hacen cosas muy diferentes. Sin embargo, platicamos que hay mucho que tienen en común, empezando porque ambas actividades las hacen personas de carne y hueso en escenarios sociales. Por ejemplo, que la tradición oral tienen un papel en ambas. Alguien dijo "es más verdadero lo que investigan los expertos", y nos preguntamos si eso es así, si ¿aprender a indagar por ejemplo, como una de las respuestas dice, "metiendo la pata", es menos verdadero que hacerlo con un método? 

¡¿QUÉ VAMOS A HACER ENTONCES, PROFE?!

Para guiar, pero no para restringir, hemos propuesto las siguientes líneas de acción (las cuales ampliaremos en posteriores entradas de este blog):


1] Trabajar de manera colectiva sobre el núcleo que hemos llamado "Metodología de lo cotidiano, o lo cotidiano de la metodología", o de de manera más sencilla "La ciencia de lo común, o lo común de la ciencia". Como decían dos estudiantes, se trata de que ambos extremos de la dicotomía "van juntos con pegado", entrelazados. A partir de la conversación, de las ideas, proyectos, acciones, búsquedas, discusiones, imágenes, lugares, historias que løs participantes compartan y construyan sobre la provocación inicial del núcleo, generaremos iniciativas de trabajo colectivo (no proyectos de investigación) que nos permitan aprender que la metodología:

-es una vía junto a otras (de conocimiento y acción)
-está contextualizada/politizada
-se puede mezclar y remezclar
-puede ayudarnos a relacionarnos y participar con la gente 



2] Análisis crítico de la relación entre conocimiento científico y/o técnico con la sociedad, haciendo énfasis en temas de salud. En este sentido iniciamos la pesquisa de noticias que contengan estos tres elementos (ciencia, sociedad y salud), y su discusión en clase. Este análisis propone a los estudiantes de promoción de la salud enfocar cómo los conocimientos y dispositivos  científico/técnicos se insertan en dinámicas complejas económicas, institucionales, políticas y culturales. Dos textos se proponen para estas acciones, las Cartas sobre las humanidades científicas de Bruno Latour, y Némesis médica: la expropiación de la salud de Ivan Illich (ambos se encuentran para descarga en los links al final de este post y en la página de textos) [Nota: este punto integra el propósito del programa del curso de que "el/la estudiante se aproxime a cómo se construye el conocimiento en ciencias sociales", a través de un enfoque de estudios sociales de la ciencia]

3] Herramientas para una metodología abierta. Tomando en cuenta que la formación en investigación de los estudiantes continuará en otras asignaturas y semestres, este curso, más que introducción, propone ejercitar un sentido crítico, personal y colectivo de la metodología, que en mucho dependerá de la apropiación (juego, adaptación) que haga de las herramientas propuestas.    



  1. Herramientas de crítica epistemológica: categorías útiles para situar los discursos científicos y dialogar con ellos.
  2. Herramientas comunicativas y dialógicas: enfocar el sentido comunicativo de la investigación con personas, grupos y comunidades, comprendiendo que las herramientas se modifican por (y modifican) el contexto en el que se utilizan. 
  3. Herramientas de interpretación: importancia del pensamiento propio y el desarrollo de una mirada, a partir de procesos creativos que parten de relaciones con personas, sus formas de hablar y ser. Reflexión sobre la ética social.

Se proponen dos textos de referencia:
 Investigación cualitativa y subjetividad de González Rey, e Ilusionismo social. Más allá de la última frontera metodológica, de Encina y Ávila.

4] Como hemos platicado en estas primeras semanas de clase, buscamos que el trabajo que hacemos en este curso nos permita experimentar otra forma de aprender y enseñar

DESCARGAR ESTE POST EN PDF





Encina, J. y Ávila, L. (2010) Ilusionismo social. Más allá de la última frontera metodológica. En Encina, Ávila y Lourenco (coord.) Las culturas populares. Sevilla, Atrapasueños.

González Rey, F. (2006) Investigación cualitativa y subjetividad. Guatemala, Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala.

Illich, I. (1975) Némesis médica: la expropicación de la salud. Madrid, Barral.

Latour, B. (2010) Cogitamus: seis cartas sobre las humanidades científicas. Madrid, Paidos.

Martín-Barbero, J. (2009) Cuando la tecnología deja de ser una ayuda didáctica para convertirse en mediación cultural. Revista Electrónica Teoría de la Educación, Vol. 10(1), pp. 19-31

Wallerstein, I. (2007) Abrir las ciencias sociales. México, Siglo XXI.




5 de febrero de 2016

Bitácora y diario de aprendizaje




Las bitácoras o diarios son instrumentos poderosos que pueden tener muchos usos. En ciencias son utilizadas prácticamente a lo largo de todas las disciplinas, ciertamente son muy distintas la bitácora de un biólogo molecular que la de un antropólogo, la de una ingeniera de la de una historiadora, o la de un psicólogo y la de una promotora de la salud. Lo que tienen en común estas bitácoras es que:

  • llevan registros de una secuencia temporal (periodos diarios, semanales) de inicio a fin de un camino (experimento, viaje, estudio),
  • el modo de los registros puede ser múltiple: textual, gráfico y/o numérico,
  • pueden incluir aspectos formales (tablas, conteos) e informales (borradores, bocetos),
  • crean una memoria del camino que permite al observador regresar sobre sus pasos para reflexionar y valorar el proceso


Julio de 1837, Darwin, bitácora «B» sobre la Transmutación de las especies, página 36 escribió: "I think case must be that one generation should have as many living as now. To do this and to have as many species in same genus (as is) requires extinction . Thus between A + B the immense gap of relation. C + B the finest gradation. B+D rather greater distinction. Thus genera would be formed. Bearing relation" (next page begins) "to ancient types with several extinct forms"

Ahí está el garabateo de Darwin, ahora digitalizado y en línea, cuando la selección natural era una idea efervescente. Me encanta que la pieza mezcle texto y gráficos, además lo textos que aparecen en la esquina superior derecha como en globos, parece que fueron agregados después, es decir que Darwin regreso a la nota para revisarla, tal vez estaba atorado y no sabía como resolver sus ideas.  

Las bitácoras son herramientas para navegar en el desorden sin tantas restricciones, como este blog, que me ayuda a garabatear el curso, el camino. 

Recursos y materiales


Descarga: Charles Darwin, Diario de un naturalista alrededor del mundo




Sobreproblematizar, Vygotsky y el método









"No puedo volver al ayer, porque yo era una persona diferente". Lewis Carroll, Alicia en el país de las maravillas 

















Hoy inició el curso con el grupo vespertino! Lo celebro porque me estaba poniendo cada vez más nervioso, y me gustó mucho la solución final que tomó esta primera parte, y las ideas sobre mi propuesta de curso completo me empiezan a convencer. He estado revisando viejos textos conocidos, buscando nuevos, hasta a la biblioteca fui (yo que pasan semestres enteros sin que me acerque a ese lugar que fue tan importante en mi formación). Estando ahí, prácticamente solo, se me ocurrió que sería bonito explorar con los grupos lo que puede darnos la biblioteca, así que en estos días pienso hablar con la coordinadora de la biblio para ver si nos pueden dar un cursito de búsqueda, ya les tendré noticias.

En la entrada anterior les mencionaba de mi licuado de emociones, y era mi propósito hablarles de mis expectativas, pero me salí del tema, o entré a otro tema que era parte del tema. Ahora si les cuento.

Este curso me emociona, me reta, y se me complica de muchas maneras. Y es que me gusta, como decía un psicólogo ruso, sobreproblematizar, que se puede explicar como sigue: cuando sabemos la solución de un problema que tenemos enfrente, y en lugar de simplemente proceder a solucionarlo se nos ocurre que puede tener otra solución, o que a lo mejor el problema no es el problema sino otro que aún no alcanzamos a ver, y comenzamos a buscar ese otro problema o una solución diferente, entonces estamos sobreproblematizando. Algo así como inventar un problema del problema. Es un concepto con una historia muy bonita, pero se las cuento en otra oportunidad, porque sino...

Pasa que he estado muy relacionado a la enseñanza de la investigación y la metodología desde los tiempos en que inicié mi práctica docente, hace unos 16 años! Todo mi desarrollo como docente, es decir, la persona que he venido-decidido a ser está enredado con la enseñanza de la metodología de tantas formas que me es difícil iniciar por alguna parte. Tal vez por el principio sea una buena idea. Estudié la licenciatura de psicología, todas las materias relacionadas con el conocer me fascinaron: la psique, la mente, la cognición, los conceptos, la inteligencia, el pensamiento, el significado, el lenguaje. No son de las materias más populares porque están rodeadas de mucho lenguaje teórico, pero pueden ser estimulantes una vez que, como decía un amigo, se les lee como novelas, jejeje. Ahí encontré, por ejemplo, al sabio Piaget (con su pelo blanco y su pipa), que creía que los niños piensan como pequeños científicos, construyendo en sus mentes hipótesis y operaciones lógicas. No estoy de acuerdo con esa idea, pero algo que le aprendí es que los pequeños humanos no son como creen los adultos, no son simples esponjas o repetidores, más bien crean, son creadores.

En la facultad de psicología inicié a dar cursos de práctica, que consistían básicamente en que los estudiantes realizaran proyectos de investigación de acuerdo al formato de investigación experimental, dentro de una temática preestablecida. Aunque aprendí a hacerlo con destreza nunca me sentí agusto, el método-como-receta chocaba con la intención de que los estudiantes pensaran por sí mismos. En ese tiempo también me encontré con Vygotsky (que tenía una pinta de rebelde sin causa, murió muy joven, a los 34), y un texto suyo que hasta la fecha me sigue ayudando a pensar, con el vigente título de Problemas de método. Ahí decía que: “el método es, simultáneamente, requisito previo y producto, la herramienta y el resultado del estudio”. La frase me hipnotizaba, pero, cómo podía ser posible eso. Se suponía, así lo afirman todos los manuales de investigación, que el método debe establecerse antes de iniciar la investigación, que debe estar claro qué técnicas, procedimientos, etcétera, deben seguirse, de otro modo la investigación se perdería; ¿cómo sería eso de encontrar el método al final de la investigación?, Para usar una analogía de cocina, ¿cómo sería conocer la receta después de hacer el platillo? u_u

Vygotsky pensaba que en su época no existían métodos que fueran capaces de captar la complejidad de lo humano, que había necesidad de inventarlos, y por ello toda investigación de lo humano debía evaluar su método, para ir construyendo lo que él creía era la ciencia del futuro, la psicología. Esta actitud estaba influida por la época que vivió, el primer periodo de la revolución rusa, cuando cuestionar lo establecido y probar nuevas formas era bien visto, en ciencias, arte, política, hasta que... Bueno, eso es otra historia. Lo que yo he llegado a entender de la frase es un poco más mío. Como el método nos lleva siempre a un camino inesperado hay que estar pendientes de todo lo que va surgiendo en el proceso, abierto a las posibilidades de la acción, el sentir y el pensar. Se puede expresar así: quien mucho aprieta nada abarca (que es la inversión del dicho popular, quien mucho abarca poco aprieta), es decir que es mejor dejar algunas cosas sueltas, indeterminadas, sensibles.

¿Cómo enseñar esto? Bueno, eso es lo que espero que ustedes me ayuden a resolver ;-)